Los dibujos expresaban miserias con las que nuestra sociedad convive casi a diario, como formando parte del Menú del día. Pero pese a ello, la idea quedó guardada en la carpeta por miedo. Miedo a expresar la realidad, miedo denunciar la realidad, miedo a protestar en voz alta.
Y cada mes de abril desde entonces, me dirigía a esa carpeta que se encuentra en la estantería del taller, para volver a mirar la realidad, para volver a acojonarme por ella, para volver a esconderla de nuevo en la carpeta.
Pero este año ha sido distinto, ya que al volver a coger esa carpeta en el mes de abril, los dibujos no volvieron a ser encerrados, si no que vieron la luz, quizás el "¡¡¡Ya está bien!!!" fue lo que nos hizo tirar adelante con esa idea real y dura. Pero para ello hablamos con mucha gente, consultamos con muchos otros que pensaban como nosotros y que nos apoyaron y animaron a que la protesta se hiciera en voz alta.
Y yo me pregunto: ¿Y porque ahora? Pues la verdad que no lo se, pero ha coincidido con la voz de muchos otros, pero nos ha costado 5 años atrevernos a abrir la boca.
“La esperanza es un espejo colgado en el futuro” será nuestro grito en voz alta, denunciando las miserias de nuestra sociedad. Y verá la luz ahora, no sabemos por que ha sido ahora, pero ahora nos hemos atrevido, hemos perdido el miedo.
1 comentario:
Esperamos esa gran falla, que va a ser.
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