No hace mucho, en una de mis visitas al ambulatorio, escuchaba a dos mujeres que tenia al lado como compartían sus males, una le decía a la otra, “Ays hija mía, es que este dolor de riñones, me va a matar”, a lo que la otra le contestaba “pues eso va a ser descalcificación de los huesos, tu tómate estas pastillas, que la Josefa le pasa y le van de maravilla”.
Tras recoger mis recetas me dirigí a tomar un cortado al bar cercano y mientras ojeaba las noticias del periódico escuchaba a 2 hombres que comentaban “Si es que no puede ser, ¿tu te crees que poner a Villa de media punta?” el otro le explicaba un complicado sistema táctico, una sucesión de números, que yo nunca acabo de entender. Y es que nunca he sido futbolero y sigo sin entender que es eso del fuera de juego.
Y claro en un país donde todos somos los mejores médicos, y los mejores entrenadores de fútbol, ¿como no vamos a ser los que más sabemos de Fallas?
Es muy habitual en una conversación entre falleros escuchar eso de "yo opino que .... y como pago mis cuotas....." o "Hombre yo soy fallero desde que nací, ¿como no voy a saber de fallas?", y la verdad que estos planteamientos además de ser normales, son correctos desde el punto de vista de la pertenencia a un colectivo, que bien puede ser una comisión fallera, una peña gastronómica, una asociación de vecinos, o una peña taurina, donde la pertencia al mismo te da derecho a expresar tu opinión pero siempre en lo referente a la convivencia del colectivo.
No me imagino al medico en su consulta ante el caso del dolor de riñones de la mujer que he dicho anteriormente, salir de la misma y preguntar a todos los presentes “¿Bueno, a ver, ustedes que opinan que tiene la Señora Rosario?” y que la opinión mas votada sea la que dictamine su diagnostico.
Ni me imagino a Quique Sánchez Flores en Mestalla, preguntar por megafonía cual es el cambio o el planteamiento táctico que los socios quieren para el partido.
En fallas cada uno tiene su propia opinión de lo que es falla, opinión que generalmente la defendemos los falleros como si de una verdad absoluta se tratase. Y es que para poder ejercer de medico o de entrenador de fútbol debes estudiar y pasar por unas pruebas / exámenes / oposiciones, pero para opinar sobre fallas, la cosa cambia bastante.
Hace ya algún tiempo en el Fanzine L’Esclafit intentamos reflejar en cada número una definición de falla desde los diferentes puntos de vistas de los falleros.
La falla desde el punto de vista del que la tiene como punto de reunión habitual de los amigos, para jugar la partida de truc, de parchís, o dominó, lugar donde realizar diferentes tipos de actividades, bailes, preparación de espectáculos, manualidades diversas, etc. Quizás expuesto así la falla no se diferencia de cualquier Asociación de Vecinos, o Club Social.
La falla desde el punto de vista del que se dedica a la recuperación de nuestras tradiciones, nuestra cultura, que realiza un gran esfuerzo investigando y dando a conocerla. Visto así no se diferencia de asociaciones culturales o folclóricas .
La falla desde el punto de vista del que tiene como principal objetivo ensalzar la figura de la mujer, en concreto la mujer valenciana, usando como medio la figura de la Fallera Mayor de cada año, teniendo como objetivo que sea para ella un año inolvidable, “su año” como habitualmente se suele decir.
La falla desde el punto de vista del que el monumento fallero es el único fin, no únicamente lo que le da nombre a nuestra fiesta, si no lo único que realmente es la fiesta.
Por supuesto que cada vertiente tiene diferentes variantes, fallero social truquero, fallero social playbaquero, fallero social solidario, fallero cultureta teatrero, fallero cultureta folclórico, fallero cultureta filosófico, fallermayorista tradicional, fallermayorista bonicor, monumentalista barroco, monumentalista quanmesgranmillor, monumentalista que modernoquesoy, monumentalista con colesterol, etc., posiblemente tantos etc. como falleros somos.
Pero una cosa tengo bien clara, y es que ninguna de las definiciones anteriores son las validadas (al menos para mi) y es que cada una por si sola son incompletas, pero es que ni siquiera se pueden complementar con otra mas, si no que son necesarias las 4 juntas y en proporciones equilibradas.
4 pilares indispensables para la comisión fallera, que es como a mi me gusta llamar lo que habitualmente llamamos Falla. 4 Pilares que deben actuar como las 4 patas de una mesa que hace que sea estable y al mismo tiempo no esté desnivelada.
Generalmente por mi experiencia personal es muy complicado conseguir el equilibrio que creo (repito que desde mi punto de vista muy particular) seria necesario en cualquier comisión fallera, y lo habitual en la mayoría de los casos es que predomine uno de los pilares, incluso en ocasiones alguno de los pilares no existe o existe por obligación.
Es habitual escuchar eso de “ ¿y para que gastarse mas en el monumento? total yo ni le doy la vuelta” o “¿una charla cultural? Y eso que tiene que ver con una falla” por no decir una de las frases que mas me ha impactado en los últimos tiempos, frase totalmente cierta y dicha por un presidente de falla “Ferrán, no te equivoques, la cultura en las escuelas, lo nuestro es beber y f..llar”, por lo que generalmente lo de ensalzar los valores de nuestro monumentos falleros y de nuestra cultura, lo dejamos para la figura del mantenedor en las exaltaciones falleras y generalmente suele ser cuando a la mayoría de los falleros presentes o bien desconectan o aprovechan para ir al servicio y de paso tomar algo en la barra del bar. ¡¡¡¡Eso sí!!!! nos llena de orgullo escuchar y sentirnos los falleros los salvadores de cultura valenciana, pese a que no sea lo nuestro.
Cada vez pienso más que es necesario para el bien de nuestras Fallas, parar, ver que somos, de donde venimos, y donde queremos ir, ya que si lo que realmente queremos es olvidarnos de algún pilar de los 4 que he citado, hacerlo sin remordimiento alguno, siendo consecuentes de lo que hacemos.
(Continuarán mis reflexiones en voz alta en la sesión del psiquiatra fallero)
Cada vez pienso más que es necesario para el bien de nuestras Fallas, parar, ver que somos, de donde venimos, y donde queremos ir, ya que si lo que realmente queremos es olvidarnos de algún pilar de los 4 que he citado, hacerlo sin remordimiento alguno, siendo consecuentes de lo que hacemos.
(Continuarán mis reflexiones en voz alta en la sesión del psiquiatra fallero)
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